Después del paron de navidad, de alguna ausencia justificada y la suspensión del encuentro de la semana pasada... tanto tiempo sin jugar... a uno de los jugadores le traicionaron los nervios. Bueno, a mi me traicionaron los nervios. Tal fue el estado que no recuerdo apenas la sucesión de los encuentros ni los parciales.
Me han chivado que empezamos ganando con un 0-3, pero nos remontaron con un 4-3 plantándonos cara. Así llegamos igualados hasta el 7-5, perdiendo finalmente por 7-6...
Yo solo recuerdo que no entraba nada y perdiamos... y que de vez en cuando un aire frío me recorría la espalda. Roque, con alguna racha buena, saco adelante alguna de las parditas. Eso si, nos lo pasamos bien y nos reímos (ellos y nosotros) gracias a alguna de esas ocurrencias típicas de Marcos.
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Conclusión del partido: un poco mas de experiencia no bien mal. Los esperamos en casa.
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